Si ves que tu amigo rechaza su alimento y te preguntas por qué mi gato no quiere comer, haces bien. Siempre que veamos a nuestra mascota sin ganas de comer, debemos tomarlo como un signo de que algo pasó. La falta de alimento por períodos prolongados tiene serias consecuencias en la salud, algunas irreversibles. 

Por esa razón, te daremos 5 consejos para que tu gato coma y evitar cualquier problema. Además, intentaremos comprender el motivo de su conducta. 

¿Por qué mi gato no quiere comer?

Las razones por las que nuestro amigo rechaza su comida pueden ser muy variadas. Por ejemplo, podría tratarse de que aburrió su alimento habitual y quiere un nuevo sabor. Esto sería una situación muy simple que se puede abordar fácilmente. Pero, existen otros casos donde la causa pueden ser enfermedades o alteraciones serias. 

Sin importar cuál sea la causa por la que mi gato no quiere comer, debemos actuar. Si el animal pasa mucho tiempo sin alimentarse, es posible que se vea afectado por lipidosis hepática felina. Consumer la describe como una afección que ocasiona una gran acumulación de grasa en el hígado. Y puede llegar a ser mortal en varios casos. 

La lipidosis hepática felina puede aparecer incluso después de períodos cortos sin alimento, como dos o tres días.

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5 consejos para que tu gato coma

Además de la afección que te mencionamos antes, pueden surgir otras complicaciones por la falta de nutrientes. Affinity Petcare señala que los gatos no alimentados podrían sufrir de hipoglucemia severa y pérdida de masa muscular. Ahora veamos cómo evitar estos problemas. 

1. Dosifica la comida en raciones pequeñas

Si mi gato no quiere comer, es posible que tenga que ver con la forma que lo alimentamos. En la naturaleza, los felinos no tienen alimento disponible las 24 horas del día, sino que lo cazan. Debido a esto, muchos expertos recomiendan dosificar la comida en varias raciones pequeñas a lo largo del día. 

1. Calienta un poco la comida

Es importante recordar que la comida que ofrezcamos a nuestra mascota debe ser apetecible o no comerá. Sacar una lata de alimento frío de la nevera no es especialmente atractivo. Podemos intentar calentarla un poco en el microondas para hacer que el sabor y olor sea más intenso. Incluso es suficiente con sacar la lata una hora antes para que adquiera temperatura ambiente. 

1. Cambia de lugar el alimento

Cuando mi gato no quiere comer, debemos saber que a veces los felinos rechazan su alimento por su ubicación. Por ejemplo, si ponemos la comida junto a su arenero, lo más probable es que no coma. O si la colocamos en lugares ruidosos, esto podría estresarlo y hacerle evitar la comida. 

Entonces, la solución es colocar su comida en un lugar que le resulte más tranquilo y cómodo. También podemos acompañarlo hasta su comedero si acaso no quiere comer por estrés. Hablarle o acariciarle un poco mientras se alimenta puede ayudar. 

1. Introduce variaciones en su dieta

Compra alimentos de diferentes sabores y texturas para descubrir cuáles le gustan más. Muchas veces los gatos rechazan la comida porque ya les aburre. De ser posible, podríamos acompañar su comida habitual con algunos alimentos que le gusten. Siempre y cuando estos sean aptos para el consumo felino. 

1. Compra alimento de calidad

Es fundamental que el alimento que le ofrezcamos a nuestra mascota sea completo y de buena calidad. Una comida poco nutritiva puede terminar siendo rechazada. 

No olvides consultar con especialistas

Para finalizar, es posible que mi gato no quiera comer porque se siente enfermo. En ese caso, debemos acudir con el veterinario para que haga la evaluación pertinente. Los parásitos intestinales y otro tipo de afecciones estomacales generan pérdida del apetito. Solo el especialista sabrá qué hacer en esa situación.