Existen problemas de articulaciones que deterioran la estructura ósea de las patas delanteras de nuestras mascotas, debilitando su marcha, equilibrio y fuerza para estar levantados. Si bien es cierto que existen razas más propensas que otras, la debilidad ósea puede generar problemas de flexibilidad o movilidad de sus patas.

Asimismo, es necesario observar el andar de nuestros perros por si presentan inflamación o hinchazón por trauma de algún golpe recibido. Esta condición requiere atención veterinaria en primera instancia para buscar razones médicas por la cual nuestra mascota presenta debilidad.

¿Por qué mi perro tiene debilidad en las patas delanteras?

La debilidad genera una inestabilidad que puede pasar a mayores al limitar los movimientos de las patas delanteras, generando también dolor y puntadas. De igual manera, la descalcificación puede extenderse a medida que nuestros canes envejecen, limitando y dificultando la movilidad en cualquiera de sus patas.

Tal como plantea Ortho Dog, puede deberse a múltiples causas debido a enfermedades crónicas, fracturas o golpes que afecten los huesos y las articulaciones. De igual manera, propone que la debilidad podría estar relacionada a esguinces y dislocaciones que afectan los tejidos, generando una incomodidad en su flexibilidad.

Desde un punto de vista menos traumático, Global Mascota plantea que la debilidad en patas delanteras puede deberse a los efectos secundarios de la rabia, garrapatas y moquillo. En condiciones avanzadas de cada situación, nuestros perros podrían sufrir de espasmos y parálisis musculares de forma parcial, lo cual claramente se atribuye a la debilidad. 

Tratamientos para fortalecer las patas delanteras de los perros

Este problema fisiológico requiere de atención veterinaria, puesto que se escapa de las manos del cuidado en casa debido a la delicadeza que implica. Partiendo de la revisión médica, es necesario que sometas a tu mascota a radiografías donde descarten cualquier lesión grave y apostar por una leve rehabilitación. Es importante que evites la opción de cirugía, debido a que representa una recuperación forzada que podría repercutir en otras coyunturas.

Adicionalmente, el portal Walkin’ Pets agrega que la debilidad en patas frontales puede deberse a un trauma en cuello u hombros, atribuyéndose a un problema neurológico. En estos casos, recomiendan tres tipos de herramientas asistentes para guiar a nuestros canes mientras caminan, tales como arneses, arneses y sillas de ruedas caninas. Aplicándolas de manera sutil, permitirán a los peludos recobrar confianza para caminar firmemente en el menor tiempo posible.

Te recomendamos vigilar y replantear su dieta, puesto a que la falta de suplementos ralentizará su metabolismo y nutrición. Asimismo, al no ingerir alimentos sanos puede padecer de obesidad, generando sobrepeso sobre sus patas delanteras.

Consejos para ayudar a tu mascota en casa

Si las patas de tu perro están muy débiles y necesita de tu apoyo como sostenerse y andar, probablemente necesite terapia para caminar con arneses. Más que todo durante los paseos es cuando deberás tener mayor cuidado, por lo tanto deberás asegurarte de no dejarlo solo.

Por otra parte, la actividad física es una medida infalible para fortificar las extremidades de los perros, basado en la constancia y dedicación. Muchos terapeutas recomiendan realizar hidroterapia como un método natural, productivo y divertido que suele resultar efectivo durante su recuperación. Al permitir que tu mascota realice este ejercicio al menos tres veces por semana, reducirá la tensión, atrofia y espasmos musculares.

Desde otra perspectiva, debes alimentarlo con recursos ricos en minerales, fósforo, calcio y magnesio para mantener sus articulaciones, músculos, tejidos y huesos. Su dieta mejorará a partir de alimentos como el salmón, trucha, atún, patatas, aguacate, frutos secos y otros ricos en vitamina A, D y K.