Durante los últimos años las tortugas acuáticas se han convertido en una mascota común entre los niños. Esto se debe a que como no requieren de gran responsabilidad, muchos padres consideran que es una gran opción para sus hijos. Sin embargo, esto no quiere decir que no se les deba dar atención y cuidado.
La llegada de un nuevo integrante a la familia siempre nos puede poner algo nerviosos. Por eso es fundamental que conozcamos correctamente a nuestras mascotas, así podremos entenderlas y ofrecerles lo que ellas necesitan. La página web Peces y Acuarios señala que las tortugas de agua se caracterizan por:
A pesar de ser un animal bastante calmado y con poca expresividad, las tortugas presentan distintas necesidades cuando de cuidados se trata.
Esta clase de tortugas requieren de un espacio acuático y uno seco para vivir
Esta clase de tortugas requieren de un espacio acuático y uno seco para vivir. Estas son las características que debe cumplir el área en el que desenvuelve tu mascota:
El blog sobre mascotas ExpertoAnimal, comenta que la temperatura conveniente para el agua del acuario es entre los 26°C a los 34°C usa un calentador cuando sea necesario. Los cambios drásticos de temperatura no son buenos para la salud de nuestra mascota.
No obstante, cabe mencionar que las tortugas en el clima frío se vuelven más lentas y en el calor sufren de debilidad y quemaduras provocandoles la muerte. Asimismo, a la zona del terrario es importante que le den los rayos del sol. Esto ayuda a que el reptil pueda secarse y sus huesos y el caparazón se mantengan sanos.
Las tortugas acuáticas son omnívoras, así que puedes alimentarla con proteína animal, vegetales, frutas e incluso insectos como los grillos. También puedes comprarle comida preparada para ellas en la tienda de mascotas.
La cantidad de alimento dependerá de la edad y el tamaño. Si es una tortuga pequeña solo le darás comida una vez al día y si es grande lo harás tres veces. Recuerda quitar los restos de comida para que el lugar no se ensucie demasiado.
Al igual que otras mascotas, nuestras tortugas deberían visitar al veterinario periódicamente. Y aunque no es necesario vacunarlas, nuestras amiguitas son portadoras de bacterias. Es por eso, que deben ser desparasitadas 2 veces en el año y la mejor época para hacerlo es durante primavera y acabado el verano.